Gaslighting: qué es y cómo identificarlo.

 

Imagina que expresas cómo te sientes tras una discusión, y la respuesta que recibes es: "estás exagerando." O que mencionas algo que recuerdas claramente y te dicen: "eso nunca pasó, te lo estás inventando." Incluso podrías escuchar: "tienes una memoria pésima, siempre distorsionas las cosas." Si este tipo de respuestas no son puntuales, sino que se repiten con frecuencia y te generan confusión, dudas o inseguridad sobre ti mismo/a, podrías estar siendo víctima de una forma sutil pero muy dañina de manipulación psicológica conocida como gaslighting.




¿Qué significa "gaslighting"?

El término gaslighting proviene de una obra de teatro de 1938 titulada Gas Light, llevada posteriormente al cine, donde un marido manipulaba a su esposa haciéndola dudar de su percepción de la realidad. Hoy, el término se usa para describir una forma de abuso psicológico en la que una persona manipula a otra para que dude de su memoria, percepción o juicio.

No se trata de un simple desacuerdo o una mentira puntual, sino de un patrón de comportamiento persistente y sistemático que puede tener consecuencias graves en la autoestima y la salud mental de quien lo sufre.

¿Cómo actúa el gaslighting?

El gaslighting puede ocurrir en distintos contextos: en relaciones de pareja, familiares, laborales o incluso sociales. Algunos ejemplos de frases comunes incluyen:

  • “Estás loco/a, eso nunca pasó.”

  • “Te estás inventando las cosas.”

  • “Solo estás buscando atención.”

  • “Estás demasiado sensible.”

Con el tiempo, estas estrategias pueden generar confusión, inseguridad, dependencia emocional y aislamiento. La víctima puede llegar a dudar de su propia capacidad para interpretar la realidad, lo que aumenta su vulnerabilidad ante otros abusos.

Señales de que podrías estar sufriendo gaslighting

  • Te disculpas constantemente, incluso cuando no sabes por qué.

  • Sientes que no puedes confiar en tus propios recuerdos o emociones.

  • Te cuesta tomar decisiones sin la aprobación de la otra persona.

  • Experimentas una pérdida progresiva de autoestima.

  • Personas cercanas notan cambios en ti y te preguntan si estás bien.

¿Qué hacer si crees que estás siendo víctima?

  1. Confía en tus emociones. Si sientes que algo no está bien, probablemente no lo esté. 

  2. Habla con alguien de confianza. Compartir lo que vives puede ayudarte a contrastar percepciones.

  3. Lleva un registro. Anotar situaciones puede ayudarte a ver patrones que antes pasaban desapercibidos.

  4. Busca ayuda profesional. Un psicólogo puede ayudarte a recuperar la confianza en ti mismo/a y establecer límites saludables.

El gaslighting es una forma de violencia emocional que puede pasar desapercibida precisamente porque ataca lo más básico: la propia percepción de lo que nos ocurre.  Nombrarlo, identificarlo y hablar de ello es el primer paso para prevenirlo y combatirlo.

En  psicoterapia, trabajamos no solo en identificar estas dinámicas, sino en reconstruir la autoestima, el criterio personal y las relaciones sanas. Nadie debería dudar de su realidad por influencia de otro.

Mario




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